sábado, 13 de septiembre de 2008

Las Cancion.


Digamos que una cancion es musica con voz, cantada pues. Se distingue por eso mismo de la musica meramente instrumental. La palabra se vuelve en una cancion el instrumento central, ellas nos conducen hacia donde el artista nos lleva.

Si bien las palabras son el vehiculo mas rapido que nos llevan a las emociones, estan tienen la limitante de que el receptor debe tener una experiencia mas o menos en comun con la obra. Por eso el tema del amor es tan recurrente, todos nos enamoramos y desenamoramos. Hablar de amor y desamor garantiza que todos podamos sentirnos identificados por la cancion. Por el contrario, hay canciones muy buenas que hablan de temas que no nos son afines, por ejemplo la guerra, la migracion, esas obras se restringen a un cierto publico, a ciertos lugares.

La cancion es sencilla de escuchar, las palabras lo hacen casi todo, no se requiere mayor educacion auditiva, ni concentracion, nada o casi nada, solo prender la radio, activar el on del estereo. La cancion es un articulo perfecto para estos tiempos.
En lo personal y, por lo antes expuesto, no he encontrado una cancion que refleje fielmente lo que yo siento, eso es imposible. Sin embargo hay frases en muchas canciones que me identifican rapidamente, son como flechazos. Y el tema central de la cancion puede ser uno muy distinto a la interpretacion que en mi interior le puedo dar.
Alcides

viernes, 12 de septiembre de 2008

Confieso que fui al Tec.


Si, lo confieso. Pase mas de cinco años en sus aulas, en sus patios, en su biblioteca, con sus maestros, sus alumnos…pase mas de mil noches sin dormir o máximo mal dormir un par de horas; me ausente hasta de fiestas familiares esos años para poder lograr la meta, terminar la carrera…camine muchas veces media ciudad para llegar a el y aun muchas noches salía de clases tan tarde que ya no había autobuses e igualmente me regresaba caminando.
Confieso que no fui un estudiante modelo, que nunca fui el primero de clase, desde primaria hasta terminar la profesional, mas recuerdo que mi padre decía: no te preocupes, mas vale pasó que dure y no trote que canse; así conocí a varios que venían de ser los mejores de sus preparatorias y no pasaron del tercer semestre.
Confieso que tuve maestros patéticos cuya ignorancia los hacia revolcarse en las argumentaciones dignas del tirano mas infame: si yo digo que dos y dos son tres, entonces son tres, ¿Por qué?, porque soy su maestro y al que me contradiga me lo chingo y lo mando a repetición a priori. Por eso repetí alguna materia, de lo cual estoy orgulloso. Pero también tuve los mejores maestros, verdaderas luces de la conciencia del todo, maestros que en Estática enseñaban Sociología y en Matemáticas un poco de Política; verdaderos hombres dispuestos a pagar el precio de la incomprensión de un alumnado adormecido por años y años en un sistema reducido a la memorización, la repetición y la sustitución, pero creo que su esperanza radicaba en que alguno se salvaría; si es así, quiero ser uno de ese resto.
Confieso que parado aca, diez años después, hubiera querido que mi educación fuera otra, mas humana, mas cercana a la realidad y no en su mayoría una abstracción de un mundo que te espera para volverte su esclavo del consumismo. Me viene a la memoria el testimonio de un exseminarista que decía que el fue un gran aprendiz en Teología, pero que al salir a la calle no sabia ni hacer un deposito bancario…eso nos falto, quizás porque se asume que es lo mas fácil de aprender, pero el mundo fuera del Tec no esta para enseñarte, esa es la verdad.
También hubiera querido una educación mas global, yo que estudie Ingeniería Civil el noventa porciento de las materias eran matemáticas y el resto ciencias económicas administrativas, ¿Dónde quedo el arte?, ¿la filosofía?, ¿la psicología? Y tantas y tantas otras disciplinas del saber humano…eso se nos dejo como una tarea personal no obligatoria y lo que es peor nunca se nos dijo que teníamos esa tarea, por eso hay tanto profesional que da pena por su ignorancia. Tantos que se conformaron con leer una novela en segundo de secundaria porque así lo exigía el programa educativo y eso que sacaron diez de calificación en el resumen a tres cuartillas para pasar esa unidad en la materia de Español; eso de que en México se lee un promedio de un poco mas de un libro por persona al año es realmente una exageración que solo se la creen los que no leen.
Confieso que me siento lejos de lo que puede ser una educación de nivel superior, pues como ya lo dije, desde primaria, hasta el ultimo día en las aulas el paradigma vigente entiende a la educación como el acto de memorización, repetición y sustitución de valores en las formulas ya establecidas como dogmas…si, por ironías de la vida, no se puede hablar de Dios en las escuelas, sin embargo la educación esta llena de dogmas de fe pues infinidad de cuestiones tienen un mero sustento empírico basado en la observación de los fenómenos físicos. Por eso existe en Ingeniería el famosísimo factor del miedo, es decir que una vez desarrollado los cálculos para por ejemplo los elementos estructurales de una casa, se le aumenta alegremente un porcentaje que va hasta el cuarenta por ciento “por si las moscas”.
Así la Ingeniería Civil esta sufriendo un estancamiento que lleva más cien años, una especie de era del oscurantismo se cierne sobre esta profesión porque a las nuevas generaciones no se les enseña o impulsa a la investigación.
Confieso que lo mas probable es que esto este pasando en todas las demás profesiones que se pueden estudiar en una universidad o en un instituto tecnológico simplemente porque así es el sistema educativo nacional.
Confieso que he vivido, dijo Neruda, y yo hago mía esa frase: confieso que fui al Tec, que quizás no sea todo lo que puede ser, pero la realidad solo se puede modificar a partir de lo que es, sopesando todo lo bueno y malo, de lo contrario lograr el cambio es solo una demagogia, por eso se fracturo el sistema comunista, porque solo considero al hombre en función del materialismo o a lo máximo querer verlo todo a través del materialismo. Así pues no hay tiempo para pesimismos u optimismos, es la hora de la verdad –de la realidad- y la verdad es que la educación en global puede llegar a ser mucho más. Cada quien haga algo desde su posición concreta.

Alcides

Homosexualismo, una vision como catolico.



Todo tema que involucre a la sexualidad humana es visto con sospechosismo en la Iglesia, pues desde sus cimientos biblicos tiene una marcada influencia machista y para llegar a esta conclusión no es necesaria una hermenéutica muy exhaustiva, estas verdades están allí flotando en las cartas paulinas.

El macho no tolera que otro de su género sea diferente, ni siquiera se plantea la posibilidad de que otras formas sean posibles y mucho menos se preocupa por investigar o entender en que consiste la diferencia con aquel que debiera ser -según el- igual. Basta ser diferente para ser equivoco. Aquí la nace la “intolerancia sexual” que padece la persona homosexual, producto de la ignorancia y la cerrazon. Ahora bien en el contexto social esta intolerancia se convierte en una marginación que produce no pocos efectos psicológicos sobre el individuo.

En este marco discriminatorio que afecta la conciencia misma de la persona, debe ser muy difícil para estas personas asumirse como tal, de allí la poca conciencia que tiene de si mismo, pues se asume como lo asumen los demás. Desconozco cual podría ser el alcance de esta autoconcientizacion del ser, pero a la luz de la fe, debiera encontrar su sentido escatológico –insisto, escatológico-, pues de lo contrario seria un sin sentido peor que la inconciencia de si mismo. En este”sin sentido” del ser encuentro la justificante por la cual muchos homosexuales se asumen, visten, hablan, etc., etc. como una imitación burlesca de la mujer.

Hoy en medio de esta cultura hedonista ya nadie quiere cargar su cruz, o a lo menos, queremos escoger que cruz cargar. Es decir, ya no queremos asumir al sufrimiento como un elemento de la vida, pues hemos olvidado la función vital y escatológica del mismo y con este olvido más o menos conciente pasamos a ser los más miserables de todos, como sentencio San Pablo. Asi, navegamos velozmente al puerto de la anarquia con bandera de “tolerancia”; esa forma de “tolerancia permisiva” es tan dañina como la forma de “tolerancia dadivosa” que tu bien señalabas.

En mi pensar la homosexualidad es una condición del ser, ahora bien, en el ser interactúan razón y voluntad. Descartes plantea que la primacía de la segunda sobre la primera constituye la pecaminosidad humana, sin embargo desde la fe podemos considerar una fuerza mas actuando en el ser, esta fuerza es la Gracia, lo cual abre el problema a la discusión metafísica, pues el balance de estas tres fuerzas nos es imposible cuantificarlo. Planteado de otra manera seria así: nos es imposible determinar cual es el alcance de la Gracia en una persona homosexual que trata de vivir desde la fe su condición.

Siempre me ha parecido obsesivamente perturbadora la imagen del árbol de la ciencia del bien y el mal en medio del edén., el malum, el manzano, ¿Qué de malo puede haber en comer de aquel fruto? Creo que esta misma pregunta se plantean aquellos que promueven toda liberalidad de la condición homosexual, es decir, se plantean ¿Qué de malo puede tener dejar sin freno esta la condición?.

Sin embargo creo que una postura todo permisiva es una solución fácil, en la imagen del Génesis, la permisividad es la decisión de Adán de comer aquella manzana, pues visto desde la condición cristiana no podemos olvidar que el sufrimiento tiene su mas profundo sentido en el anhelo escatológico –insisto, insisto e insisto-, el sufrimiento constituye pues a mi ver, la decisión de abstenerse de aquel manjar. Esta solución fácil (o permisiva) acarrea al final de cuenta un sinfín de problemas mas graves o visto desde el Génesis, acarrea la expulsión del edén.

3.-En resumidas cuentas mi postura es esta: Dios no se equivoca y ha creado a la especie humana, hombre y mujer, o como canta, Roberto Carlos: “cóncavo y convexo, así es nuestro amor en el sexo”; de esta estrofa lo primero que nos salta a la vista es la palabra “sexo” sin embargo lo relevante es la palabra “amor”. Amor y pasión, son términos que tendemos a confundir en el corazón pues una disociación alegre conduce al error; la pasión es la fuerza que mueve a la homosexulidad, pasión que parece amor, amor entendido como la fuerza primera que da sentido al ser.
Mientras que no tengamos la voluntad de afrontar el sufrimiento como elemento vital, como parte del ser, caminamos a la descomposición del individuo, la familia, la sociedad, la cultura, inclusive a la de la iglesia misma.

Mentiria si dijera que he quedado plenamente conforme con mi propia respuesta, se que este tema da para mucho mas, y hay muchas variables que dejo de considerar. Pero hasta el día de hoy esta es mi postura mas sincera.

Dice Ratzinger: Discernir claramente lo que es fundamental y lo que pertenece a las consecuencias es una condición indispensable para una reflexión teológica sobre la liberación; creo que este discernimiento también es necesario para la homosexualidad.

Ser permisivo bajo el argumento que puede haber placer y afectividad en una relación entre personas del mismo sexo me parece también una simplificación por demás peligrosa.

Me declaro poco conocedor del tema, así que tambien asumo a Schelder: El buen principiante es esencialmente escéptico.



miércoles, 10 de septiembre de 2008

En torno a una lectura de Ortega y Gasett


Continuo leyendo "El tema de nuestro tiempo" y, cada dia me convenzo mas que el camino de la razon desemboca tarde o temprano en la fe, pero a su vez, el camino de la fe, desemboca en la razon.

El hombre es una entidad unica, con su peculiaridad bien definida, se mueve entre los ejes de la voluntad y la razon. En la voluntad habita la fe, el impulso "instintivo" de que hay algo mas alla de lo palpable. En el eje de la razon hay una busqueda constante, la razon es inquieta, traviesa, tormentosa, no se deja amedrentar. Entre ambas van construyendo al individuo.

El equilibrio entre estas dos fuerzas o principios es necesario, el predominio de una sobre otra vuelve al ser enajenado. Si predomina la voluntad, tenemos a una persona que vive victima de sus caprichos, fanatico...el que se deja predominar por la razon se vuelve insensible, vive de la materia y para la materia, las cosas no tienen atributos, son solo cosas.

Alcides

martes, 9 de septiembre de 2008

Hoy prefiero seguir leyendo "El tema de nuestro tiempo", del filosofo español Jose Ortega y Gasset. Libro pequeño, de unas 60 paginas maximo, pero denso como buen libro de filosofos.

lunes, 8 de septiembre de 2008

¿Qué es perder el tiempo?


¿Qué es perder el tiempo?, en la actualidad se puede decir que derrochar el tiempo es invertirlo en actividades que no te dan un beneficio visible y a la primera. Perder el tiempo es dejar de ganar algo, si es dinero es mas grave aun, así lo dicta la cultura consumista imperante.
Perder el tiempo es pues, uno de esos graves errores que se cometen circunscritos en una época, en la actual, esto es imperdonable. En otros siglos un error fatal seria no irse a La Cruzada hacia tierra santa (para un católico) o no apoyar el nacionalsocialismo de Hitler (para un alemán).
Y lo curioso es que necesitamos hacerlo, quedarnos así, como si la nada y el viento nos fueran a empujar, allí es donde nacen las ideas, donde nos ponemos introspectivos, descubrimos y creamos esos detalles que van diferenciando nuestro existir.
Perder el tiempo y el ocio creador vienen siendo sinónimos o hermanos siameses, coexisten. El cerebro no descansa, pero sino lo dejamos trabajar para si mismo, si siempre lo entretenemos en otras mil actividades, nunca se vuelca sobre si mismo, no se piensa a si mismo, lo cual, en el fondo, es lo que nos distingue del ser meramente animales.
¿Cómo perder el tiempo? Claro esta que no cualquier cosa es perder el tiempo adecuadamente. Ya que “perder” en este sentido significa dejar de un lado el beneficio material y buscarnos. Así que lo correcto es “perder” buscándonos o, perdernos en nuestra búsqueda. Pero no un extravió en el sentido catastrófico sino en el de la introspección, somos seres tan complejos que difícilmente acabaremos en esta vida de encontrar algo nuevo en nosotros mismos en estas zambullidas en la caverna infinita de nuestro espíritu y nuestra mente.
Alcides

domingo, 7 de septiembre de 2008

La Anciana


Cuando se murió la anciana, no hubo quien se diera cuenta. Vivía sola desde que su también anciano marido se le adelanto unos seis meses antes. Así que se quedo allí sentada en la poltrona en que había pasado prácticamente los últimos cinco años de su vida hasta que la muchacha de la servidumbre entro a la casa al día siguiente. Ella fue la que llamo a la ambulancia, los cuales nada pudieron hacer.
Cuando llego el ministerio publico a dar fe de los hechos, que es llegar y apuntar como encontraron el cadáver. Le preguntaron a la sirvienta a quien podían avisar de familiares, ella dijo que apenas tenia un mes trabajando allí, que el único que los visitaba era el vecino. El sabía hablar ingles y por eso podía platicar con la anciana. La muchacha se limitaba a hacer su trabajo de limpieza y, solo hacia de especial su trabajo respecto de otras casas el gran numero de latas de cerveza que recogía por doquier, ya que la anciana era alcohólica. En especial alrededor de la poltrona, pues casi, casi allí vivía la dueña de aquella casona.
El ministerio publico salio a la banqueta para dirigirse con el tal vecino, el cual coincidió que iba llegando y estaba abriendo el portón de su casa. El agente lo llamo por su nombre y le explico con frialdad la situación: la anciana estaba muerta y necesitaban avisar a algun familiar. Este dijo que no conocía a ninguno, pero sabia donde estaba la agenda telefónica de los viejos. Acordaron ir de inmediato a buscarla, El vecino se quedo guardando el coche en su casa, el agente regreso a la sala.
Llego el vecino, vio a la muerta y sin gestos fue a la mesa del teléfono, empezó a hojear y se topo con un nombre y un numero, estaba escrita “Hija” y un numero de Estados Unidos. Acordó con el ministerio público que marcaría a ese número. Así lo hizo, contestaron pronto, el vecino empezó a desarrollar su lenguaje que era bastante fluido, pero sin emociones, como quien hace un trámite gubernamental. Colgó al minuto, el ministerio público estaba intrigado, de todos los miles de muertos que había tenido que ir a ver, este era el primero al que nadie le lloraba.
El vecino hizo la breve traducción una vez que colgó: si era su hija, no iba a venir, tenia mejores cosas que hacer, le encargo que la incinerara y que hiciera lo que quisiera con las cenizas, si las echaba por el escusado no había problema, que después llamara a ese mismo numero para dar el costo del funeral y se le cubrirían los mismos con una compensación extra por las molestias.
El ministerio publico ha este punto no se sorprendió mucho, los americanos jubilados comúnmente vienen a vivir sus últimos años a estas tierras. Son gente, a veces, que traen su vida destrozada, sin familias. Que solo quieren morir en silencio después de tanto ruido que ha habido en sus vidas.
Le dijo al vecino que a tales horas podía ir por el cuerpo, este dijo que enviaría la carroza de la funeraria, que harían todo el trabajo. Quedaron de acuerdo y se despidieron con un saludo de mano y una sonrisa fría.
Después el vecino se fue a casa, quería comer, tenia hambre y este altercado le retrazo los alimentos unos 20 minutos mas. La sirvienta se quedo a limpiar por última vez la casa y levantar los botes de aluminio. La muerta en la sillona esperando que fuera levantada.


Alcides